Tatiana Applevenom

☽ D. Psicológica ☾

 Inteligente: Aunque se haga la tonta, sabe bien lo que pasa a su alrededor, no te equivoques, no todas las chicas guapas son idiotas. Le gusta escuchar, no es cotilla, pero siempre permanece atenta a lo que se comenta a su alrededor.

Manipuladora: Está dotada de unas habilidades innatas para manipular a su antojo. Cuando algo le interesa o desea mucho suele manipular todo lo que pueda hasta conseguir las respuestas o aquello que ansía. También se vale mucho de una de las maravillas que domina.

Irónica: Le gusta este tipo de humor, le hace sentirse inteligente, no todo el mundo se da cuenta cuando le están llamando tonto sin ser pronunciada esta palabra. Suele expresar lo que siente mediante la ironía también, se ríe mucho con esta forma de actuar, pero muchas veces no entienden su humor.

Vengativa: Quien la hace la paga, ese es su mejor lema. Irá a por ti como le hagas daño, puede parecer una chica buena, pero no es tonta, sabe defenderse y lo hará sin dudarlo si le juegas una mala pasada.

Sensual: Le encanta la sensualidad, todo lo sexy y provocar, por el único y mero placer de sentirse deseada. No busca nada más puesto que ella no  cree en las relaciones sinceras y de amor.

Reservada: En lo que se refiere a sus sentimientos si no los expresa con la ironía, no los expresa, directamente. Su fiel reflejo son sus ojos, en ellos verás cómo se siente, pero ella nunca te reconocerá si está triste o le pasa algo.

Orgullosa: No se deja ayudar, quiere solucionar todos sus problemas por ella misma, considera que por el hecho de ser mujer no tiene que ser débil. Lo hace todo por sí misma y si le sucede algo nunca lo dirá, cogerá el toro por los cuernos y solucionará sus asuntos con la mayor discreción.

Desconfiada: No suele confiar mucho en la gente, el hecho de ser reservada y orgullosa hace que muestre aún más recelo cuando alguien intenta que confíe. Nunca lo hará, a no ser que seas alguien que se lo haya ganado.

Protectora: Protegerá a los suyos con la vida misma si hace falta, es una mujer valiente y luchadora que no le teme a nada pese a que algunos la consideren una simple rubia tonta, no quieras saber lo que esta mujer puede hacerte.

Sincera: Y directa, no tiene miramientos en decir la verdad aunque escueza y duela. Aún más si eres su amigo o amiga. Lo hace para que esa persona abra los ojos y se de cuenta de la realidad. Aunque si le caes mal, tampoco tendrá problemas en soltar todo lo que piensa con tal de hacer daño, sabe que las palabras duelen más que los hechos.

Sádica: Sentir la sangre sobre su cuerpo y ver como los demás sufren por su culpa, le apasiona. Adora torturarlos y hacerlos agonizar hasta que sus ojos se quedan sin vida.

Fría: No cree en el amor, ya lo ha tenido y no le ha servido para nada, cree que te hace débil y vulnerable, por eso no se permite nada más que sexo. Eso implica también que no tenga amigos, o al menos no cómo tendría otra persona. Ella los considera más aliados.No es nada cariñosa, y el único sentimiento fuerte que tiene es la ira.

Irascible: No le calientes la cabeza porque explotará de la peor forma. No tiene paciencia y se cabrea con facilidad. No le gustan las normas, ni que le digas qué hacer o cómo hacerlo.

Su lema es: "No te ates a nada que no puedas dejar en treinta segundos".

☽ Historia ☾

Nombre del padre: Jack Applevenom (Fallecido)
Nombre de la madre: Katherine Maxwell (Desaparecida)
Hermanos: Violet Applevenom
Otros familiares: -

Historia personal:
Su vida se podría resumir en asesinatos, una familia desestructurada por completo y malos tratos. Tatiana nació un trece de marzo en Los Ángeles, California. Nació en el seno de una familia de clase media pero tirando a la alza. Su madre entró en depresión nada más tenerla, de hecho jamás quiso tenerla pues era producto de una violación que el propio padre cometió con Katherine. Además de que tenía miedo de que su hija fuera bruja como ella, poderes de los que siempre ha renegado. Aquella depresión le duró demasiado tiempo, tanto que llegó a rechazar a su hija obligando a su marido a tener que cuidar de la niña. Sin embargo, años más tarde, volvió a quedarse embarazada. Creyendo que Tatiana sería quién heredaría sus poderes, a Violet sí la quiso y sí la cuidó. Lo que provocó, al menos al principio, que la mayor odiara a la pequeña, al punto incluso de intentar ahogarla varias veces. Al final, Katherine encerró a Tatiana en la buardilla y sólo salía de allí cuando ella lo permitía.

Ésto provocó aún más problemas en la familia. Katherine era alcohólica desde que tuvo a Tatiana, y Jack la sometía a palizas cada vez que le daba el arrebato. Cuando Violet se fue haciendo mayor subía cada vez más a ver a su hermana. Lo cual creó entre ambas un vínculo especial. La rubia entendió que la pequeña no tenía culpa de nada, si no que la desgraciada de su madre las había querido separar desde el principio. Harta de la situación, Katherine les abandonó, y con su huída, llegó la liberación de Tatiana, algo trastornada por el encierro. Al principio era el ojito derecho de su padre, ya que era la que peor estaba psicológicamente, la apuntó a clases de defensa personal cuando estaba entrando en la adolescencia, quería que pudiera protegerse de todo. Además, le enseñó a usar la pistola que él tenía en casa, aunque nunca le dejaba cogerla a solas. Pero a medida que Tatiana fue creciendo, este amor fue disminuyendo y convirtiéndose en odio. La niña representaba el abandono de su madre, además de parecerse demasiado a ella como para soportarlo. Su relación se rompió. Tatianaa era una adolescente rebelde, insoportable que siempre se salía con la suya, dejó de ser la niña adorable para convertirse en un monstruo.

Pasando de las normas impuestas en su casa, con el costo de varias peleas, conoció a un chico, León. Ese fue el detonante. Empezaron a salir juntos, todo parecía ir estupendamente, ella estaba completamente enamorada y ciega. Al poco de estar juntos, él le puso los cuernos. Ella se enteró y lo primero que hizo fue pegarle una paliza casi de muerte a la chica, y luego se enfrentó a él discutiendo por lo que había hecho. Pareció que aquello sirvió de algo, pero al poco tiempo el chico volvió a las andadas. Esta vez la chica sufrió un poco más, pero Tatianaa era lo suficientemente lista como para que aquellas peleas parecieran defensa propia. Aquella vez volvió a discutirse pero él empezó a minarla mentalmente hasta conseguir hacerla casi sumisa sin que ella apenas se diera cuenta. Tras eso vinieron los malos tratos, ella aguantaba vete tú a saber por qué, jamás le había tenido miedo a nada, y podría decirse que aquella vez fue la única. Así hasta que abrió los ojos. No podía contar con nadie para ayudarla, pues con su padre ni se hablaba. Y su hermana no tenía por qué verse inmiscuida en ello. Ahí explotó y sin comerlo ni beberlo sus poderes hicieron aparición. Él intento arremeter nuevamente contra ella, pero sin saber cómo ella hizo que las cortinas empezaran a arder. Cuando él paró al ver cómo ardían las cortinas sin comerlo ni beberlo, ella le hizo una llave, lo tiró al suelo, se puso encima, claro que él empezó a forcejear. Ella iba notando la ira por todo su ser y en una de las veces que le puso la mano en la boca y nariz intentando que no respirara, provocó que la alfombra dónde estaban ardiera, y con ella la ropa del chico, y finalmente él. Se levantó asombrada, sin reaccionar casi. Pero al ver como su ex ardía tirado en el suelo y revolviéndose, sonrió ida completamente. Su padre que había escuchado el ruido subió a la habitación y vio la cara de diversión de su hija y el chico ardiendo. Intentó apagar el fuego del chico mientras le pedía a Tatiana que llamara a los bomberos, cosa que ella ignoró por completo. Finalmente, nadie pudo salvarle la vida al chico y el fuego fue extinguido cuando llegaron los bomberos. Tatiana fue condenada por asesinato, pero debido a su estado mental, debía cumplir condena en un psiquiátrico. Desde entonces ella notaba que había algo que la protegía,, pero fue fruto de aquella explosión de ira hacia su ex.

Tatiana pasó allí unos meses, ella sabía que no estaba loca, pero la cara de su ex, muerto, le satisfacía tanto que pronto se dio cuenta de que quería más. Y el nuevo objetivo era su padre. Él le había metido en el manicomio por no aceptarla nunca como era. Violet iba a verla a escondidas, porque su padre no quería que tuviera contacto con la mayor. En el tiempo que estuvo allí, Tatianaa empezó a practicar, dándose cuenta de que no sólo era capaz de provocar fuego, si no que podía controlarlo, en cierta medida, porque provocó más de un altercado con el fuego debido a que no dominaba el poder. Un día en el que la enfermera iba a darle la medicación se encargó de que le dejara la puerta abierta. Tatiana pensaba que su poder era sólo el fuego, pero, tras la insistencia de la enfermera en que se tomara la medicación, la rubia se le acercó mirándola fijamente y con voz amenazante le dijo que no tomaría nada. No se explicaba cómo la enfermera le hizo caso, y probó suerte, le dijo que le abriera la puerta y así hizo. La tenían con camisa de fuerza, pero no le hizo falta mover las manos. Al salir provocó que el cuerpo de la mujer ardiera con sólo pestañear. La enfermera ni lo vio venir, apenas le dio tiempo a avisar. Cuando los dos gorilas entraron a por Tatiana, ésta ya no estaba. Caminó a toda prisa por los pasillos que ya se conocía, provocó diferentes incendios en diferentes salas para sembrar el caos y poder salir de allí. A lo cual, su Terrenal ayudó. Al salir se topó con su hermana, la cual le ayudó a quitarle la camisa de fuerza. Violet le contó que mientras no había estado le habían pasado cosas raras. Ambas decidieron huir, sintiéndose más seguras con la protección de aquel ser que estaba ligado a Tatiana.

Se valió de sus dotes de seducción para que un imbécil que pasaba por la carretera les llevara a su casa. Y cuando estuvo allí llamó al timbre como persona civilizada que era. Cuando su padre la vio deseó que fuera un fantasma, pensando que era su fin. Obviamente lo iba a ser, pero Tatiana prefirió hacer que se confiara. Le dijo que solo quería hablar, fingió estar recuperada pero a la vez arrepentida por lo que había hecho. Fallo. ¡Qué sencillo y mortífero puede ser el cuerpo humano! ¡Qué bien estaba hecha la naturaleza! Sin que su padre fuera consciente provocó que sus órganos se fueran quemando. Su cara daba miedo, sus ojos salían de sus órbitas con una mirada completamente ida en la locura, una sonrisa sádica apareció justo en el momento en el que su padre perdía la vida. Cuando acabó con él sintió su cuerpo agotado, pesado y casi sin energías, de hecho se sentía al borde de la muerte. Se aferró a todo lo que pudo para mantenerse en pie. Consiguió salir a la calle y ahí se desplomó frente a su hermana.
Cuando abrió los ojos, días más tarde, se encontraba en una casa lujosa, aunque con un toque bastante hortera, las luces rojas hicieron que Tatiana tuviera problemas para enfocar la vista. Cuando lo hizo vio al hombre que las había recogido para llevarlas a casa. Al recuperarse del todo él le ofreció un sitio dónde vivir a cambio de que trabajara para él. Ella aceptó con la condición de que su hermana no fuera tocada, y no, no es una triste historia de una mujer obligada a ejercer la prostitución, aceptó de buena gana. Adoraba sentirse deseada y con tal poder de dominación que hiciera que los hombres cayeran a sus pies. Una persona ética diría de ella que era una jovencita loca y descarriada, un despojo de la sociedad. Pero ella tenía más ambición que aquella. Llevando ya allí un tiempo empezaron a correr rumores de que un "enemigo" estaba quitándole las chicas a su jefe. Ella ya se había acercado a él para ver si era cierto. Al poco tiempo escuchó cómo su jefe le pedía a uno de sus sicarios que matara a aquel tipo y ella vio su oportunidad para subir un peldaño más. Se adelantó a aquel sicario, le envió a otro lugar y ella misma contactó con el proxeneta enemigo. Fingió estar a disgusto con su jefe y querer traicionarle. El pez mordió el anzuelo. En pocas horas se encontraba en el negocio enemigo. Tras horas de charla el hombre se excusó para ir al baño y ella vio su oportunidad. Sin dudarlo se levantó yendo hacia fuera del puticlub haciendo arder todo a su paso.

Cuando su jefe se enteró de lo ocurrido y consiguió a sus chicas de nuevo, ascendió a aquella joven a ayudante personal. No sólo se dedicó a ser prostituta, si no que además ayudaba al señor O'Connor en todo lo referente al negocio. Éste le pagó de artes marciales. Y ella por su cuenta entrenaba sus poderes para hacerse más fuerte. Poco a poco consiguió no debilitarse tanto, controlarlos mejor y usarlos a su voluntad. Pero pasado el tiempo empezaba a sentirse insatisfecha y no veía la manera de conseguir más. Nuevamente, cambiaron de vida y lugar.

Estuvieron viajando y practicando su magia. Tatiana desarrolló el instinto, lo cual les ayudó a guiarles por un camino de aprendizaje. Conocieron a otras como ellas, aunque no todas acabaron bien. Algunas fueron cazadas, otras simplemente decidieron separarse de ellas por Tatiana. Poco a poco fueron recopilando información y conociendo mejor sus poderes, hasta el día de hoy. Tatiana tiene varios poderes, aunque no los controla todos a la perfección. Pese a que sabe cambiar su forma, aún no lo controla demasiado y no suele durar demasiado transformada. No suele usar la teletransportación, aunque sea una habilidad por defecto, pues no quiere correr el riesgo de morir de la forma más tonta. Finalmente se han asentado en Coven Hills. Un lugar lleno de historias misteriosas.

Otros datos a tener en cuenta: Tiene un tatuaje que se hizo cuando estuvo con su único amor. Reza lo siguiente: "Te amo como se aman ciertas cosas oscuras, secretamente, entre la sombra y el alma."

Ficha Aceptada

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